lunes, 28 de junio de 2010

El Bardo (*)


fotografía:http://nuestroarteamigos.ning.com/photo/santuario-del-libro?context=user
autor: Luis Orchevecs Ferenczi
... ... ... ... ... ... ... ... ...

La primavera le dio de lleno en el cuerpo.

- Fantástico - pensó Lucía caminando las calles de Madrid por vez primera. Veintidos horas atrás había dejado el aeropuerto de Montevideo en medio de un remolino de hojas secas, en el otoño austral.

Llevaba pasos seguros, lo que hacía más fantástica su percepción. En la Gran Via preguntó a un caminante, solo para confirmar el rumbo. La Gran Via estaba engalanada por los festejos del Centenario.

- He venido en buen momento, se dijo.

A poco de andar, a la vuelta de la esquina, la calle Hortaleza apareció tal como la imaginaba. En el número 5 entró.

También el olor de los libros era como lo imaginaba. Había esperado por años estar allí y hurgar los anaqueles buscando aquel libro oriental que Ossip y Horacio comentaban en Rayuela. Un libro mencionado en otro libro leído en su adolescencia, "El Bardo".

El nombre del libro no alteró la expresión afable del vendedor, al contrario. Sonrió satisfecho al decirle:
- Por supuesto señorita, lo hemos recibido esta mañana mismo y tal como le hemos prometido, lo enviamos a la dirección que usted indicó.

Fueron inútiles los intentos de Lucía por hacerle saber que ella jamás había estado allí, al menos físicamente. Sólo imaginó cientos de veces ese diálogo, desde el otro lado del mar.

Ahora sus pasos hacían el camino inverso, hacia la casa de pensión donde se alojaba desde la noche anterior.

-Han traido ésto para tí, coge el paquete, allí sobre la mesa... por cierto, he debido pagar ..
Lucía no oyó más ..

Un libro pequeño, con letras marrones en la tapa era el contenido del paquete, junto a una factura de tamaño inusitado que rezaba sobre una cifra inentendible en pesetas, la fecha de emisión:
Madrid, mayo 20 de 1965.

Cecilia


(*)
“El Bardo Thodol” nombre original del libro se atribuye según la tradición budista tibetana a Padma Sambhava, y consiste básicamente en instrucciones para transitar la vida, ésta y las que vendrán.

Como sabemos, los budistas ( una de las grandes religiones de la humanidad ) creen profundamente en la reencarnación.


Gracias Luis, por la fotografía .. y la inspiración !

domingo, 27 de junio de 2010

el nombre de los gatos

TODO GATO TIENE TRES NOMBRES ..
AFIRMA T.S.ELIOT EN "EL LIBRO DE LOS GATOS"















No son más silenciosos los espejos
ni más furtiva el alba aventurera;
eres, bajo la luna, esa pantera
que nos es dado divisar de lejos.
Por obra indescifrable de un decreto
divino, te buscamos vanamente;
más remoto que el Ganges y el poniente,
tuya es la soledad, tuyo el secreto.
Tu lomo condesciende a la morosa
caricia de mi mano. Has admitido,
desde esa eternidad que ya es olvido,
el amor de la mano recelosa.
En otro tiempo estás. Eres el dueño
de un ámbito cerrado como un sueño.
JLB



no lo nombra, solo describe lo que admira y ama ..

JORGE LUIS BORGES estaba fascinado desde la infancia por los grandes felinos y adoraba a los gatos. El poema anterior está en su obra 'El oro de los tigres' (1972)
En los últimos tiempos vivió junto a dos gatos: Odín y su amado Beppo, un fiel aunque irascible gato blanco llamado así en honor a un personaje de Lord Byron (quien también tenía un gato con dicho nombre).


A su adorado Beppo, Borges le dedicó estos versos incluidos en su obra 'La cifra' de 1981:




BEPPO

El gato blanco y célibe se mira
en la lúcida luna del espejo
y no puede saber que esa blancura
y esos ojos de oro que no ha visto
nunca en la casa son su propia imagen.
¿Quién le dirá que el otro que lo observa
es apenas un sueño del espejo?
Me digo que esos gatos armoniosos
el de cristal y el de caliente sangre,
son simulacros que concede el tiempo
un arquetipo eterno. Así lo afirma,
sombra también, Plotino en las Ennéadas.
¿De qué Adán anterior al paraíso,
de qué divinidad indescifrable
somos los hombres un espejo roto?
Jorge Luis Borges (1899, 1986)





las imágenes son algunos de los magníficos trabajos fotográficos hechos por Luz, enhttp://aomaraluz.blogspot.com/2010/06/bastet-gatos.htmldonde nos cuenta sobre Bastet, deidad-gata en las antiguas regiones del Nilo.

¡¡ gracias Luz !!


CORTAZAR
Hace más de veinticinco años que se fue para siempre a los tejados de París, a mirar a las magas desde las mansardas, pero hemos recuperado las imagenes en sepias de Julio Cortázar. En una de ellas, sentado en el suelo, el gran cronopio mira por la ventana; al otro lado del vidrio, un gato le mira a él. En otra aparece con un gato atigrado en los brazos, él con esa belleza triste, el gato con ese gesto solemne y enigmático de los gatos. Queda claro que el gato es un ser superior, Charles Darwin debió olvidarse de los gatos en sus análisis. Ya dijo Mark Twain que el cruce de persona con gato sin duda mejoraría la especie humana, pero empeoraría a los gatos.

Teodoro W. Adorno era el gato de Cortázar, aunque esto no es correcto, porque los gatos no son de nadie. Como mucho, te conceden que les des de comer, que los tengas en casa y que les rasques, si a ellos les apetece. El mismo Cortázar describe cuidadosamente el proceso en su cuento La entrada en religión de Teodoro W. Adorno. Julio Cortázar eligió para aquel gato el nombre del filósofo, a quien por cierto la Universitat de les Illes Balears dedicó hace un tiempo un simposio, con sus ponencias oportunamente publicadas. Adorno negó que después de Auschwitz pudiera seguir escribiéndose poesía, reflexión que continúa inquietándonos.

´RAYUELA´ es uno de esos libros que han cambiado la vida de la gente. Rayuela es la librería del barrio o del centro en muchas ciudades. Hay librerías que se llaman así, Rayuela, en Málaga, Sevilla, Sigüenza, Barbastro. Por mencionar las de fuera de Argentina.

Los gatos no leen, no tienen dinero (ni lo necesitan), pero en Rayuela también salen gatos. Qué sería de los tejados de París sin los gatos, de las calles monacales palmesanas, de los muelles mediterráneos en su conjunto.

HEMINGWAY vivía rodeado de gatos, he leído en algún sitio que de gatos de seis dedos en cada pata, y escribió el relato El gato bajo la lluvia (como el de Audrey Hepburn en Desayuno con diamantes), del que dijo Gabriel García Márquez que era el mejor cuento que había leído en su vida.


. . .

estamos solos
la noche el frío y tú,
tierno gatito
¿y él?... clavado en el fondo
dorado de tus ojos

(tanka)
Cecilia

viernes, 18 de junio de 2010

Los sentidos


Mosaico Granadino
fotografía de MA
http://elblogde-ma.blogspot.com/2010/06/pieza-de-ceramica-granadina-grabada.html
Es muy probable que no existan unos versos más descriptivos, más sentidos y más conocidos que los de Francisco A. de Icaza, aquellos que recomiendan: «Dale limosna, mujer ». Unos versos que se leen y repiten todos los días del año, centenares, miles de veces, por gentes de todo el mundo. Que se fotografían, adquieren en soporte 'souvenir' y se conservan en hogares de los cinco continentes mientras reiteran sin cesar la más sucinta y acertada recomendación que jamás se haya escrito para pregonar el atractivo de la ciudad de Granada, España.

Alhambra.

Grata la voz del agua
a quien abrumaron negras arenas,
grato a la mano cóncava
el mármol circular de la columna,
gratos los finos laberintos del agua
entre los limoneros,
grata la música del zéjel,
grato el amor y grata la plegaria
dirigida a un Dios que está solo,
grato el jazmín.

Vano el alfanje
ante las largas lanzas de los muchos,
vano ser el mejor.
Grato sentir o presentir, rey doliente,
que tus dulzuras son adioses,
que te será negada la llave,
que la cruz del infiel borrará la luna,
que la tarde que miras es la última.

Jorge Luis Borges


--------------------------------------------------------------------------------

Borges visita la Alhambra cuando ya había perdido del todo la vista, y lo hace para enseñársela a su compañera María Kodama. Así ha interpretado los escritores Antonio Muñoz Molina y Francisco Ayala este poema:

"…Que la tarde que miras es la última", dice al final el poema de Borges, fechado en Granada en 1976, diez años exactos antes de su muerte. Probablemente, intuía, al salir de la Alhambra con melancolía y desgana, con cansancio de hombre viejo y ciego al que la celebridad le acumula viajes agotadores, presencias de desconocidos, horas de abatimiento en habitaciones de hotel, que ya no volvería nunca a ese palacio tan claro en la memoria, tan hecho de niebla y de voces en el regreso. Con frecuencia escribía sobre las cosas que hacemos inadvertidamente por última vez: cerrar una puerta que ya no cruzaremos de nuevo, un libro que no tendremos ya tiempo de abrir. Comprendería que se estaba despidiendo para siempre y no sólo de la Alhambra sino también, de algún modo, del recuerdo venerado de su visita de tantos años antes, cuando su padre vivía y su madre era joven, cuando él mismo era un muchacho miope y tímido, asustado del mundo, enfermo de literatura. María Kodama iba con él: ella es quien me contó la impaciencia con que Borges se preparaba aquella mañana para la visita, anticipándole las maravillas que recordaba bien y que ella aún no había visto, tan ilusionado por volver y mostrárselas que hasta se le olvidó que estaba ciego.


--------------------------------------------------------------------------------

Es un poema conmovedor. La radiante, deslumbradora luminosidad de la Alhambra está
‘vista’ por el ciego mediante los sentidos restantes. Tampoco ahora ha de rebajar ‘a lágrima o reproche’ la referencia a su ceguera. ‘Grata la voz del agua / A quien abrumaron negras arenas’, comienza, recogiendo a través del oído la impresión del paraje que se niega a sus ojos, para apelar en seguida al sentido del tacto: ‘Grato a la mano cóncava / El mármol circular de la columna’. Y otra vez al oído: ‘Gratos los finos laberintos del agua […].

domingo, 6 de junio de 2010

"Mediante la fotografía y la palabra escrita intento desesperadamente vencer la condición fugaz de mi existencia, atrapar los momentos antes de que se desvanezcan, despejar la confusión de mi pasado. Cada instante desaparece en un soplo y al punto se convierte en pasado, la realidad es efímera y migratoria, pura añoranza."

Del libro Retrato en sepia, de Isabel Allende

... . ...

Vuestro Arte Amigos
exposicion de las fotos seleccionadas por mi como mis favoritas, es una seleccion pues no puedo poner todas.
con ellas doy las gracias a todos y cada uno de los integrantes de esta pagina



Un abrazo de Antonio en NAA:
"esto es una seleccion de las fotos que he ido seleccionando como favoritas para mi, con ellas os doi las gracias por estar en esta pagina un abrazo a todos, saludos."

¡gracias a vos, Antonio!





Para ti,
de Manuela //

"Fotos de mi amigo candonguero en Nuestro Arte Amigos"

Gracias Manuela ! es de justicia ..